SERIE ÓXIDOS

Para la realización de esta serie de fotografías he tomado como hilo conductor el color óxido tan característico de las esculturas que habitan gran parte de Navalcarnero.

En todas ellas se puede apreciar la fuerte presencia que tiene este color, y que aparte de ser el claro protagonista, en varias ocasiones sirve como encuadre para el paisaje que aparece de fondo.
Mi intención con estas fotografías es mostrar la armonía que existe entre las esculturas y la propia naturaleza. Lo artificial se funde con el entorno natural para así crear un nuevo espacio, dónde existe un claro equilibrio entre la creación de la mano del hombre y la de la propia naturaleza.